10.12.08

prkng

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando llega la hora del trabajo los coches se reúnen en el parking.
Todos disfrutan juntos el momento de recreo, bueno, todos no, Amadeo es el coche de un representante y solo descansa unos minutos en cada sitio.
Pero la mayoría disponen de una jornada completa con sus dueños en la oficina.
Los viejos recuerdan tiempos pasados y comentan sus achaques (que si mi motor carraspea, que la dirección me falla ...) y los jóvenes presumen de carroceria y prestaciones. Y aveces se burlan de los modelos mas desfavorecidos (mira que enano el Smart de la 14B, el Mini de la 20G pierde aceite ...).
Por lo general no hay muchos problemas, aunque siempre hay algún desaprensivo que aparca mal o echa mucho humo. Los días que hay pelea siempre sale alguno abollado.
Cuando termina el trabajo todos vuelven a casa y Julián, el vigilante se queda tranquilo, pero triste por Ginés, el 600 oxidado que lleva 47´5 años esperando a su dueño ...

¡Por Dios Pamp, haz algo, no le dejes ahí solo en ese parking tan grande!

¿Es que no tienes corazón?

Alex dijo...

ok! ok!
Ahora saco a Ginés de ahí!